El asesinato de Álvaro Roncancio, presidente de la Junta de Acción Comunal de la localidad de Tenjo, en Palmira (Valle del Cauca), elevó a 101 el número de líderes sociales asesinados en lo corrido del 2025 en Colombia, según el observatorio de Indepaz.

Roncancio había denunciado amenazas y fue desplazado forzosamente desde su vereda hasta el casco urbano, donde finalmente fue atacado en el sector de Bulevar de la Carbonera. La Defensoría del Pueblo había advertido sobre el riesgo extremo en esta zona, donde operan estructuras armadas como el Frente 57 Yahir Bermúdez, la columna móvil Adán Izquierdo del Estado Mayor Central y bandas locales.

Catatumbo y suroccidente, los más golpeados

Otro de los casos recientes fue el de Jhon Esneider Pabón Osorio, líder comunitario y miembro de la Asociación por la Unidad Campesina del Catatumbo, quien había responsabilizado al Eln de las amenazas contra su organización. La región, en disputa con el Frente 33 de las disidencias de las Farc, es escenario de una violencia que este año ya desplazó a más de 60.000 personas.

De acuerdo con Indepaz, los homicidios se concentran en 72 municipios de 23 departamentos, principalmente en el Catatumbo y en el suroccidente del país (Valle del Cauca y Cauca). Los liderazgos comunales son los más afectados, con 24 víctimas, seguidos por las autoridades indígenas (19) y los líderes políticos (9).

Una violencia persistente

En 2024 se registraron 173 asesinatos de líderes sociales, y en 2023 fueron 188. Las organizaciones advierten que, de mantenerse esta tendencia, el 2025 podría cerrar con cifras similares.

Firmantes de paz también bajo ataque

Los firmantes del Acuerdo de Paz continúan siendo blanco de una violencia estigmatizante y selectiva. Según Indepaz, entre enero y agosto de este año ya se registran varios asesinatos de excombatientes, en un patrón que persiste como represalia por su condición política.